No respetar su libertad
Los perros, al igual que los humanos, necesitan tener libertades para poder tener una vida sana y digna. Las libertades del bienestar animal son: Libre de sed, hambre y malnutrición; es decir, que no le falte una buena alimentación, libre de disconfort, libre de dolor y enfermedad, libre de expresarse, libre de miedo y estrés. Conocer y respetar esto hará que nuestra mascota tenga una vida plena.
No educarlo correctamente
No solo basta con amar a nuestro perro, también tenemos el deber de educarlo. Enseñarle las normas de la casa ayuda a fomentar una buena convivencia entre todos los integrantes del hogar. El adiestramiento también es esencial para que tu canhijo se estimule a nivel físico, cognitivo, emocional y social.
Castigarlo física y mentalmente
Cualquier tipo de violencia es totalmente contraproducente para cualquier tipo de ser vivo. Si recurrimos a la fuerza física o humillación psicológica, en nuestra mascota solo se generará miedo y estrés. Si quieres educarlo, no recurras nunca a este tipo de castigos físicos o mentales. Por el contrario, mejor opta por los refuerzos positivos.