Cuando traemos un cachorro a casa es normal que haga sus necesidades en cualquier lugar, son como los bebés, solo que sin poderles poner un pañal. Ahí es donde entramos los nuevos padres, a tener que enseñarles día a día a crear rutinas y con mucha paciencia hacerlos entender lo que queremos que hagan.
Este proceso no será fácil, pero una vez que se logre lo deseado será muy aliviador.
Aquí te dejamos algunas recomendaciones para hacer el entrenamiento más sencillo:
1. Dale un espacio único
2. Haz una marca de pertenencia
3. Elimina cualquier tipo de marca de lugares indeseados
¿Por qué no debemos utilizar ni lejía, ni amoniaco para limpiar la orina?
La lejía y el amoniaco son componentes que atraen mucho a los animales, ya que la orina contiene también amoniaco. Por ello, si limpiamos con este tipo de detergentes, el animal puede verse atraído por el olor y volver a hacer pis donde has limpiado.
4. Paciencia y reforzamiento positivo
Te tomará tiempo lograr que tu mascota repita el comportamiento como se lo estás enseñando, pero tendrá un resultado gratificante. Cada vez que tu mascota realice su rutina de baño correctamente, prémialo con algún treat o cariño, de esta forma estimularás a que lo haga nuevamente.
Cuando tu cachorro ya esté listo para salir, será otro tipo de entrenamiento el que deberás realizar, pero ya habrás sentado una buena rutina y se te hará más fácil.